Ya hace un tiempo conocí a un ser de cabello castaño,
Su alma estaba tensa, pero suave al respirar.
Su perfume inundaba la piel de cualquier otra piel que se le
parezca.
Sus suaves manos convertían en escultura todo cuerpo que tocaba,
dejando perplejo al corazón.
Allí entré a ese mundo,
sin saber que el amor podía golpear una puerta y derrumbar muchas más.
Tal vez este ser no habite más en esta tierra.
Sensible su corazón pero dura su coraza,
Loco del viento, la suave brisa te trajo hasta mí.
Hoy le escribo mirando al Sol, a pesar de la lluvia incesante,
las gotas grises, tristes corren aún por la ventana.
Pero una sonrisa se asoma en el recuerdo, como
las que sabía robarme.
T.B
Alelí.
Sus suaves manos convertían en escultura todo cuerpo que tocaba,
dejando perplejo al corazón.
Allí entré a ese mundo,
sin saber que el amor podía golpear una puerta y derrumbar muchas más.
Tal vez este ser no habite más en esta tierra.
Sensible su corazón pero dura su coraza,
Loco del viento, la suave brisa te trajo hasta mí.
Hoy le escribo mirando al Sol, a pesar de la lluvia incesante,
las gotas grises, tristes corren aún por la ventana.
Pero una sonrisa se asoma en el recuerdo, como
las que sabía robarme.
T.B
Alelí.